Blog que repasa la actualidad taurina de Almería, Andalucia y España. La opinión crítica e independiente sobre el mundo de los toros. Por Alberto Gutiérrez.

4 de octubre de 2008

Cuando un "victorino" humilla


Cuando un "victorino" humilla, la fiesta se convierte en un espectáculo de envergadura desconocida para quien está acostumbrado al toro perruno y ovejuno; el toro-perro y el toro-oveja decoran los festejos taurinos con tanta frecuencia que hasta el más conspicuo aficionado comienza a pensar que un toro bravo representa la rara avis de algo que en su día advirtió como el más mágico de los acontecimientos que suceden sobre la faz de la Tierra. Pero, en ocasiones, la casta y bravura de las reses aflora y los espectadores se embriagan de emoción, las plazas crujen y los propios toreros salen de los cosos con la seguridad de haber realizado una proeza; siquiera por haber desafiado la bravura de los temibles "victorinos".

Hoy, en Las Ventas -y en la televisión- hemos disfrutado con un corridón de toros del señor Victorino Martín, quien ha lidiado uno de los mejores encierros que se recuerdan en Madrid. Enhorabuena, ganadero. Bravos, encastados, prontos, alegres, nobles..., los astados han brindado la emoción y las orejas a los toreros que, sin embargo, han desaprovechado semejante caudal de embestidas.

Antonio Ferrera ha estado vulgarote y no ha entendido a sus dos enemigos, de excelente clase. Diego Urdiales, quizá el más entregado de la terna, se las ha visto con un primer enemigo de peor condición y con un quinto de excepcional nobleza, al que ha sometido, pero sin entregarse, sin emplearse a fondo. Ha cortado una oreja, después de una estocada casi entera. Sin embargo, yo me quedo con la sensación de que ha estado muy por debajo del animal.

A Luís Bolívar se le ha ido el tercero, un pedazo de toro. Yo no sé lo que le pasa a este chico, pero no remata ni un muletazo. Los olés brotan cuando el pase es largo y se remata en la cadera, no por las nubes, como hace él. Pero nadie se lo dice. Incluso Molés y compañía le cantan su "torería" y lo poco que se entera el público. Qué barbaridad, qué manera de hacer campaña a favor del colombiano.

La corrida de Victorino Martín ha sido fantástica y, por cierto, muy rápida. Lo de este ganadero es digno de estudio. Cuarenta años en la cumbre. Cuarenta años de pulcra y exigente selección, a pesar de algún bache. Felicidades, Victorino. Olé, maestro.

No hay comentarios: